Enrique Osorio
Agencia Reforma

GUADALAJARA, Jalisco.- La delincuencia organizada renovó ayer el estado de alerta en Jalisco y atacó varios tramos de la Carretera Santa Rosa-La Barca, en el municipio de Ocotlán.
El saldo fue una oficial de la Guardia Nacional (GN) herida, cuatro bloqueos carreteros, dos patrullas dañadas y dos autos particulares asegurados.
De acuerdo con policías, el enfrentamiento fue poco después de las 11:00 horas en la Colonia Riveras de Zula, en Río Colorado y Avenida 20 de Noviembre, como se llama el tramo de la Carretera Santa Rosa-La Barca que pasa por la cabecera.
En el cruce, criminales a bordo de una camioneta con blindaje artesanal y una Suburban se encontraron en su camino contra un convoy de la Guardia Nacional (GN) y la Policía del Estado, lo que desató los disparos.
Ahí hirieron de bala a una integrante de la GN, fue trasladada a un hospital cercano para su atención.
Tras el tiroteo, inició una persecución, parte del grupo criminal huyó con rumbo a Michoacán, en un tramo de la carretera que va a Jamay perpetraron uno de los narcobloqueos, según reportes policiales.
Otro lo provocaron en el sentido hacia Poncitlán, en 20 de Noviembre y Miguel Hidalgo, al ingreso de la cabecera municipal.
El tercer punto fue en Avenida Universidad 2000 y Melchor Ocampo, cerca del CUCiénega de la UdeG, en donde colocaron un vehículo pesado.
El cuarto fue ya en Ixtlahuacán de los Membrillos, en la Carretera Santa Rosa-La Barca y Revolución, a la altura del poblado El Rodeo.
Con estas obstrucciones en los principales caminos de la región Ciénega, los criminales buscaban evitar la reacción de las autoridades para poder escapar y lo consiguieron, hasta el cierre de esta edición no se reportaba ninguna captura.
En tanto, tras el tiroteo fue asegurada una camioneta Infiniti abandonada en Miguel Hidalgo y 20 de Noviembre y un Nissan Platina con placas de Colima que dejaron junto a una patrulla de la Guardia Nacional, que tenía impactos en el parabrisas.
Otra patrulla dañada, ésta de la Policía del Estado, quedó sobre los carriles de alta velocidad de 20 de Noviembre, al cruce con Canal Ballesteros.
En tanto, para evitar que ciudadanos estuvieran en riesgo, planteles escolares y negocios suspendieron labores y dejaron a alumnos y empleados al interior de sus instalaciones.
«Les pido a todos que se mantengan resguardados en sus casas hasta que las dependencias nos garanticen la seguridad que merecemos», publicó el Presidente de Ocotlán, Josué Ávila Moreno.
Después de las 15:00 horas, planteles como el CBTis y negocios, comenzaron a dejar salir a alumnos y empleados y la calma volvió a Ocotlán.