
Abel Barajas Agencia Reforma
CHIHUAHUA, Chihuahua.- Dos semanas antes de su aparente suicidio reportado ayer, Antonio Tarín García, quien fuera operador del ex Gobernador César Duarte, solicitó la cancelación de su proceso por el presunto desvío de 250 millones de pesos del Gobierno de Chihuahua a las campañas del PRI en 2016, pero no lo consiguió.
El pasado 22 de marzo Tarín y Gerardo Villegas Madriles, ex directores de Administración y Adquisiciones y Servicios de Chihuahua, pidieron durante una audiencia a un juez federal sobreseer o cancelar el proceso que enfrentaban por peculado y uso ilícito de atribuciones y facultades.
Ambos se conectaron por videoconferencia desde sus domicilios, Tarín lucía inquieto, estaba solo y se levantó más de una vez de su silla para mover la cámara.
Gustavo Aquiles Villaseñor, juez del Centro de Justicia Penal Federal del Reclusorio Norte, argumentó que no podía llevar a debate la solicitud porque habían suspensiones definitivas de amparo que le impedían dictar resoluciones de fondo, como la cancelación de este procedimiento.
Argumentó que la Suprema Corte no ha resuelto dos amparos en revisión, uno del Gobierno de Chihuahua en el que reclama la calidad de víctima, y otro por el sobreseimiento de la imputación contra Alejandro Gutiérrez, ex secretario general adjunto del PRI.
Concluyó que debían esperar las resoluciones de esos amparos para evitar contradicciones.
Desde 2019, en uno de los escándalos de corrupción más importantes del sexenio pasado, la FGR los acusó y pidió 18 años de cárcel para ellos.
En 2017, REFORMA dio a conocer que la Fiscalía de Chihuahua había descubierto el desvío de 250 millones de pesos para campañas del PRI.
Alejandro Gutiérrez, ex secretario general adjunto del CEN del PRI, fue señalado como el principal operador, fue detenido en 2017 y poco después Tarín y Villegas quienes obtuvieron prisión domiciliaria.
Ayer se reportó la muerte de Tarín García, de 47 años de edad, presuntamente, tras arrojarse de un puente de Chihuahua durante la madrugada.