RODRIGO ÁVALOS ARIZMENDI

El pasado 15 de septiembre se efectuó un grito realmente muy cuestionado por quien fue llamado el Padre de la Patria, equivocadamente desde luego, Miguel Hidalgo y Costilla. Miguel Hidalgo la madrugada del 16 de septiembre de 1810 gritó: “¡Mueran los malos gobiernos! ¡Viva Fernando Séptimo!”. ¿Cómo podemos pensar que el Padre de la Independencia iba a gritar “¡Viva Fernando Séptimo!”?. Me parece una absoluta incongruencia política. Algunos historiadores dicen que la realidad es que Hidalgo no quería provocar a los virreyes y por eso fue despacio, cauto y sensato en su grito. Aunque creo que en realidad lo quería era acabar de alguna manera con el Virreinato y que viniera a gobernar después un heredero de la corona española. Pero ¿por qué señala la historia al cura Hidalgo como el héroe de la independencia, cuando en realidad él inició la independencia con esta arenga, la cual se consiguió 11 años después, en 1821? Es importante recordar que quien inicia la independencia de México se llama Ignacio Allende, es un error pensar que el cura Hidalgo fue el que convocó a la grey, a las masas aquel día de 1810. No es verdad, el que inicia el verdadero movimiento independiente fue Allende. Y es que los dos, Hidalgo y Allende, habían llegado a un acuerdo, el cual consistía en que Allende, que era el militar y conocedor se iba a encargar de los textos, mientras que Hidalgo lo que haría sería aprovechar su popularidad para invitar a las masas a la independencia, sin embargo Hidalgo se equivoca y dice. “Vamos a coger gachupines” y en la Alhóndiga de Granaditas manda a degollar a los españoles, matando a cerca de 300 españoles. Allende se irritó y dijo: esto no es la independencia, queremos una independencia de alguna manera civilizada y ahí surgen algunas diferencias entre ellos. Después, cuando llegan al Monte de las Cruces pues iban a tomar la ciudad de México, que la podían haber tomado porque el Virrey ya había huido de la ciudad de México, Hidalgo se opone, y entonces empiezan las diferencias militares entre ellos, cuando en realidad lo que tenía que haber hecho Hidalgo era respetar la información militar que tenía Allende, que era una persona que tenía todo el conocimiento militar de esa época. No tomaron la ciudad de México y se retiraron a Guadalajara, siendo derrotados en el Puente Calderón. Y aquí es conveniente recordar un dato muy importante: Allende intentó en tres ocasiones envenenar al Cura Hidalgo. Pero fracasó. Y a partir de ese momento en su camino ya hacia el norte, después de esa derrota catastrófica en Jalisco, Allende amarra a Hidalgo a su caballo y se lo lleva rumbo al norte. Cuando los arrestan en su camino hacia los E.U. Hidalgo era un preso de Allende, quien era, repito, realmente el padre de la independencia de México. A ellos los traicionan por una serie de circunstancias que se dan por parte del clero católico. Por ello los arrestan y los fusilan. El hijo de Allende trata de protestar y le dan un balazo en presencia de su padre, y muere. El dolor de ver morir a su hijo en su presencia fue muy grande para Allende, por todas sus convicciones políticas y militares. La anterior es parte mínima de la realidad de la independencia. Pero es la historia verdadera. Por eso nos preguntamos hoy: ¿Por qué sigue la historia y el texto oficial exaltando mitos? Probablemente porque sentían los historiadores oficiales que faltaban verdaderos héroes y entonces tenían que ensalzar la historia presentándonos protagonistas de la historia que nunca existieron como tal y hacían falta héroes aunque fuera de papel, lo cual es un error. Es importante ver cómo Allende estuvo desde el comienzo del movimiento de la independencia y no Hidalgo. Ambos fueron fusilados a mediados de 1811. La independencia se da hasta 1821, o sea 10 años después de que fusilan a Hidalgo y Allende. Posteriormente las riendas del movimiento de independencia las toma Morelos, quien fue fusilado en 1815. No hay que olvidar que el clero católico mexicano se opuso frontalmente a la independencia de México, y no solo se opuso sino que excomulgaron al cura Hidalgo. Esto se puede ver en los términos de la excomunión del cura Hidalgo. Además cuando iban a fusilar a Hidalgo le pusieron acido en las manos y se las rasparon. ¿Por qué le rasparon las palmas de las manos con acido? Porque había tenido en sus manos los santos sacramentos, de los cuales había sido un indigno tenedor. Tremendo el que a alguien le hagan eso. Lo cual le ocasionó un gran dolor, por, supuestamente, haber sido indigno de haber tocado los santos sacramentos. Lo mismo le hicieron a Morelos. Y se los hicieron por haber sido dos curas liberales, a quienes también torturaron, aunque la peor tortura fue la de Morelos, pues a él lo torturaron para que confesara quienes habían sido sus “cómplices” en el movimiento de la independencia.
La anterior es parte de la historia que celebramos el pasado viernes, que fue el 206 aniversario del inicio de la independencia de México, y lo escribo porque creo que este aniversario no puede quedar solamente en el grito, en la fiesta, en el fuego pirotécnico, sino que tiene que quedar también en la reflexión, a la cual no solemos estar precisamente acostumbrados. Por último hay que recordar que el verdadero padre de la patria fue Matías Monteagudo, porque comenzó a aplicar la constitución liberal la cual no quería el clero católico pues se sometía a las colonias español, y es entonces cuando declaran la independencia de las colonias americanas, para que no se perjudicaran los intereses del clero católico. En fin. Sin duda hay mucha historia que contar.
Previó al día del grito hemos escuchado muchas inconformidades por la manera en que los gobernantes dirigen este país, y la gente dice que no hay nada que festejar. Creo que se nos olvida que sí hay motivos para festejar esta fecha, por ello yo lo invitaría, estimado lector, a reflexionar en otro sentido. ¿Qué festejamos hoy? Bueno pues que no se nos debe olvidar: Tres premios Nobel; 20 premios Oscar; somos la segunda economía más grande de América Latina; somos el único país de América Latina, junto con Chile, que pertenece al segundo mundo; somos el primer lugar en turismo en Latinoamérica y el décimo en el mundo; contamos con las dos mejores universidades hispanas, la UNAM y el Politécnico; México es un país mega diverso con más de 1 millón 723 mil especies reconocidas; somos el país con más recursos naturales de Latinoamérica; somos el mayor exportador de petróleo de Latinoamérica; tenemos el segundo lugar al himno ¡más hermoso del mundo!; ganamos el premio a la bandera ¡más bonita y más hermosa del mundo!; somos el país de Latinoamérica con mayor tecnología militar; tenemos el mejor ejercito de América Latina; contamos con Chichen Itzá ¡maravilla del mundo!; somos el segundo país de Latinoamérica con infraestructura más moderna; los mejores hospitales de Latinoamérica están aquí; pertenecemos a la OCDE, Organización para la Cooperación de Desarrollo Económico, en donde están los 34 países más desarrollados económicamente del mundo; tenemos la mayor gastronomía de Latinoamérica, lo cual es patrimonio mundial; somos el primer lugar en matemáticas a nivel mundial; en México se inventó la TV a color; en México se inventó el chocolate; México es el mayor productor y exportador de plata a nivel mundial; México es el primer productor de pantallas planas de TV; en México se inventó la cirugía a corazón abierto, etc.
Lo anterior también debe ser motivo de festejo en esta fecha patria. No hay que regatear todo lo bueno de nuestro país. Todo lo que los malos y nefastos políticos podrán acabar a pesar de todo. Hay que ver las cosas con otro cristal. México es un gran país y debemos estar orgullosos de ello.