
Antonio Baranda y Claudia Guerrero Agencia Reforma
CIUDAD DE MÉXICO.-Si la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) rechaza el «Plan B» de la reforma electoral no pasaría nada, dijo ayer el Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Al tiempo que se acumulan impugnaciones en contra de la reforma que él mismo impulsó, el mandatario sostuvo que los ministros estarían avalando salarios estratosféricos para altos funcionarios si declaran inconstitucional la nueva normatividad electoral.
«Es que el INE desde hace mucho tiempo está tomado por los conservadores, por el bloque conservador, nosotros ganamos a pesar de ellos. Por eso cuando dicen, el ‘Plan B’, si la Corte, que es hasta posible, rechazara la ley electoral, la verdad, no pasaría nada.
«O sea, sería una manchita más al tigre, porque estarían avalando salarios estratosféricos para altos funcionarios públicos. Los mismos ministros están también violando la Constitución, porque ganan mucho más que lo que gana el Presidente de la República», afirmó.
El «Plan B» fue la respuesta de López Obrador a la negativa a una modificación a la Constitución en materia electoral, que contemplaba elegir a los consejeros y magistrados por voto directo de los ciudadanos y reducir el número de legisladores.
La reforma a leyes secundarias, que ya fue aprobada por la Cámara de Diputados y está pendiente en el Senado, contempla desaparecer mil 264 vocalías de las juntas distritales y locales del INE, así como fusionar una decena de direcciones y unidades de oficinas centrales.
Además, modifica procedimientos y plazos del proceso electoral 2024, da libertad a funcionarios de hablar de temas prohibidos en elecciones, anula sanciones a partidos, suaviza el sistema de fiscalización y cambia los módulos de credencialización a edificios gubernamentales.
Más de 80 organizaciones civiles advirtieron el fin de semana que la reforma generará un «quiebre constitucional» que afectará no sólo la vida democrática, sino la estabilidad política del país.
«En el supuesto, repito, de que dijera la Corte: es inconstitucional lo que estás planteando, lo podrían hacer, ¿afectaría? No, si este es un aparato antidemocrático. ¿Qué es lo fundamental? El pueblo», indicó López Obrador.
«¿Cómo se va confiar en los organismos electorales, si se han dedicado a facilitar y avalar los fraudes electorales en México, históricamente? Entonces, ¿por qué están ahora de nuevo ‘el INE no se toca’? Por cuestiones politiqueras, pero no es ni para preocuparse».
En su conferencia, insistió en que el «Plan B» busca reducir los gastos del INE, adelgazar el Congreso, evitar que las elecciones cuesten alrededor de 28 mil millones de pesos y afianzar la democracia.