
Petróleos Mexicanos informó que ya fue normalizado el abasto de combustible a la entidad.
En un comunicado de la paraestatal, se afirmó que fue necesario suspender la operación del poliducto Salamanca-Aguascalientes debido a una toma clandestina.
Sin embargo, se abocaron a la reparación del tramo afectado de dicho ducto y que en la madrugada de ayer se reinició el flujo de combustible.
De acuerdo a lo que asevera la empresa Pemex, “poco después se reanudó el reparto del producto a las gasolineras de la zona atendida por este sistema de transporte que abastece a la ciudad de Aguascalientes. De este modo, se está regularizando la entrega habitual de combustibles”.
Agrega en su boletín que Petróleos Mexicanos mantiene su compromiso de abastecimiento con sus clientes de la zona, a quienes ofreció una disculpa por los inconvenientes que este percance les ha ocasionado.
Asimismo, hizo un exhorto a la población a fin de evitar llevar a cabo compras extraordinarias de gasolina, ya que el abastecimiento se normalizará a la brevedad.
Se destacó que el robo de combustible pone en peligro la seguridad de las comunidades y el abasto a los consumidores, por lo que es muy importante contar con el apoyo de la población. De esta forma, para denuncias anónimas de este tipo de ilícitos, Pemex ha puesto a disposición del público el número 01 800 228 9660, al que se puede llamar desde cualquier parte del país.
ESCASEA TAMBIÉN EL DIESEL
No obstante el aviso de la paraestatal, ayer el estado continuó con un panorama difícil en la distribución del combustible en la estaciones de servicio.
De esta forma, no sólo la gasolina sino también el diesel comenzó a escasear, advirtió Roberto Díaz Ruiz, presidente de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar).
Consideró que de no solucionarse el problema de fondo por el que los combustibles no están siendo abastecidos de forma suficiente, también el sector del transporte, tanto de carga como de pasajeros, “entraremos en graves aprietos”, dijo el líder empresarial.
Indicó que primero comenzó a escasear la gasolina roja, luego la verde y ahora el diesel; sin embargo, destacó que en el caso de este último, es el combustible usado por excelencia por parte de unidades de carga y de transporte, de tal forma que, de no llegarse a regularizar de manera rápida su abasto, entrarán en una etapa muy riesgosa que podría dejar varadas miles de unidades por falta de combustible.
Dijo que apenas el martes pasado, camiones de carga realizaron recorrido por 10 estaciones de servicio y no pudieron abastecerse de diesel. No obstante, “de momento no hay combustible, pero algunas horas después, vuelve a haber y luego se vuelve a acabar, dificultando el llenado de tanques, que para un camión de carga estándar, se llena con 19 mil pesos, teniendo un periodo de duración de hasta dos días.
Mientras tanto, en un recorrido que realizó El Heraldo por estaciones de gasolina, constató que el desabasto es parcial, es decir, en las gasolineras que se acaba el combustible, cierran momentáneamente y una vez que llega la pipa de Pemex a surtir, reanudan las ventas.
Las pipas están acudiendo hasta en dos ocasiones a cada estación, para surtir parcialmente de combustibles, sin embargo, al no dejar completa la carga, la gasolina escasea, y esa es la razón por la que en determinados puntos no se cuenta con el combustible.
Un dependiente de una gasolinera al sur de la ciudad indicó que la mayor demanda de gasolina se presenta por las tardes y en la noche, que es cuando las personas salen de trabajar y van a las gasolineras a cargar.
Sin embargo, si la mayoría de las personas acuden por las tardes y noches, es posible ver filas de vehículos esperando cargar combustible, pero en las mañanas no es tanta la demanda como en las noches.
Dijo que las irregularidades en el abasto se deben a Pemex, que ha tenido dificultades para surtir de combustible a todas las estaciones de gasolina.
Por su parte, algunos usuarios indicaron a El Heraldo, que “la mayoría de las gasolineras no tienen combustible” y que tuvieron que recorrer varios puntos de distribución para poder comprar gasolina.
Los consumidores ligan estas irregularidades en el abasto de combustibles con el anunciado aumento a su precio, porque lo que buscan “es terminar con nuestra paciencia y que, ante la suspensión del abasto, las personas pidamos a gritos la gasolina sin importar el precio que paguemos”, consideró la conductora de una camioneta que dijo haber recorrido cuatro gasolineras hasta llegar la estación de servicio “La Central”, al sur de la ciudad.