El presidente de Guardabosques de “Los Cobos” A.C., Miguel Vázquez Sánchez urgió a las autoridades estatales, municipales y federales a rescatar al Bosque de Cobos de la depredación que persiste.
El activista comentó que si bien en los últimos años hubo importantes avances en la protección del Bosque de Cobos con el decreto de dos Áreas Naturales Protegidas, una de carácter estatal y otra municipal, hoy son testigos del severo impacto, derivado del avance de la construcción de nuevos fraccionamientos en el entorno de estos espacios.
Indicó que particularmente por el norte y poniente avanzan con gran velocidad los nuevos desarrollos habitacionales, provocando la pérdida del hábitat para infinidad de especies, la desaparición de espacios de infiltración de agua de lluvia, la pérdida de espacios con captura de carbono, entre otros fundamentales servicios ambientales, aunado a que los mismos procesos constructivos no tienen la supervisión suficiente por parte de las autoridades ya que hay múltiples casos que evidencian el mal manejo de sus residuos, muchos de los cuales han terminado depositados en cañadas o márgenes de arroyos y en otros casos, las constructoras se han atrevido a realizar desmontes selectivos, aún en zonas afectadas por incendios, lo cual es ilegal.
Señaló que en la operación de los fraccionamientos, es recurrente el desfogue de sus aguas residuales sin tratamiento o si efectúan alguno, éste resulta muy deficiente conduciendo dichas aguas al sistema principal de arroyos del Bosque de Cobos que afectan a diversas especies acuáticas, a los importantes afloramientos de restos fósiles e incluso a la originalidad del paisaje de arroyos estacionales.
Asimismo, dijo que a últimas fechas estos recintos naturales son irrumpidos por la incursión de malvivientes y cazadores improvisados que depredan los reductos de naturaleza que aún sobrevive.
Por lo anterior, hizo un llamado a las autoridades ambientales de los tres niveles de Gobierno para que se garantice la protección integral de esta área como un elevado ejercicio de responsabilidad en el manejo sustentable de nuestro territorio y el respeto a nuestros elementos de identidad profunda.