La Secretaría de Desarrollo Urbano Municipal ha implementado una estrategia de vigilancia mediante drones para supervisar las extensiones de las construcciones en la ciudad. Esta medida responde a la inquietud sobre edificaciones que superan los límites autorizados o que se llevan a cabo sin los permisos adecuados.
Óscar Rodríguez Godoy, secretario de Desarrollo Urbano, confirmó que disponen de drones específicos para este fin. No obstante, enfatizó la importancia de proteger la privacidad de las propiedades y de sus habitantes durante dichas inspecciones. A raíz de esto, se modificó el artículo 112 del Código Municipal, otorgando a la secretaría la facultad de emplear drones para este objetivo.
Los drones han demostrado ser herramientas valiosas para la actualización cartográfica de la ciudad, ya que capturan imágenes aéreas que reflejan la situación urbana. Sin embargo, para llevar a cabo una inspección oficial en una propiedad, la secretaría debe generar una orden de visita y notificar a los propietarios con antelación. Esta previa notificación permite a los dueños presentar pruebas y permitir el acceso a sus viviendas o edificaciones, siguiendo el protocolo legal correspondiente.
Rodríguez Godoy indicó que el uso de drones es más práctico en el caso de construcciones en desarrollo o propiedades desocupadas. Pero, en situaciones donde las viviendas están habitadas, es esencial adoptar medidas precautorias para garantizar la privacidad de los residentes.
En relación con las penalizaciones, el secretario mencionó que se imponen entre 20 y 30 multas mensuales a aquellos que superan los parámetros de construcción o que no disponen de los permisos adecuados. Estas medidas suelen derivarse de denuncias realizadas por ciudadanos.
La meta primordial de la secretaría no es simplemente penalizar, sino promover la regularización de las edificaciones y garantizar que los ciudadanos cumplan con sus obligaciones. Previo a la imposición de una multa, se ofrece a los infractores la oportunidad de resolver su situación.