Oscar Uscanga y Ángel Charles
Agencia Reforma

MONTERREY, NL.- Apenas dos semanas después de que regiomontanos relataron cómo fueron plagiados en la «ruta del terror» de la Carretera 57, en los límites entre San Luis Potosí y Nuevo León, la delincuencia secuestró a un grupo de 52 migrantes y dos operadores de autobuses en la misma zona.
De acuerdo con José Luis López, líder en San Luis Potosí de la Confederación Nacional de Transportistas Mexicanos (Conatram), el autobús en el que viajaban las víctimas desapareció del GPS a las 2:00 horas de ayer sobre la Carretera 57, a la altura del poblado de San Pablo, en Matehuala, y la señal reapareció 30 minutos más tarde en el Entronque Los Medina, en Doctor Arroyo, donde fue dejado el vehículo, ya sin los pasajeros.
Presuntos operadores del Cártel del Golfo hablaron con el transportista exigiéndole mil 500 dólares por persona para liberarlo, pero, ante la negativa, ya no volvieron a llamar.
La Secretaría de Seguridad Pública de Nuevo León reveló anoche que nueve de los plagiados, la mayoría de origen venezolano, pudieron escapar y fueron resguardados por la autoridad, pero se desconoce el paradero del resto de los pasajeros.
Las víctimas viajaban en un autobús de la empresa «Heva Tours», que salió desde Tapachula, Chiapas, y tenía como destino final Monterrey, pero fue abordado por presuntos sicarios del Cártel del Golfo.
«El transportista se dio cuenta que su camión fue desviado de la ruta en un pueblo que se llama San Pablo, por Matehuala», dijo López a Grupo REFORMA.
«(Luego, la unidad) se sale de la ruta de la Carretera 57, se mete a ese pueblo (San Pablo), se pierde como 30 minutos y vuelve a regresar a la carretera, y dejan abandonado el camión entrando a los límites de Nuevo León, ahí abandonan el autobús sin gente.
«A las 4:00 de la madrugada de ayer», agregó, «le hablan al transportista de uno de los teléfonos de los operadores, diciendo que eran del Cártel del Golfo, le piden mil 500 dólares por persona para liberarlos.
«El transportista dijo que no podía juntar ese dinero, que les ofrecía sólo lo del flete, pero no lo aceptaron, quedaron de volver».
López aseguró que los migrantes, entre ellos salvadoreños y venezolanos, cuentan con su permiso para transitar legalmente por el País.
«Después de esa llamada ya no han vuelto a llamar (con el transportista)», señaló López.
«Ninguna autoridad se ha comunicado con él», aseguró, «nada más puso su denuncia en el 911, y es todo lo que se ha tenido.
«Es por medio mío que he estado avisando a las autoridades, pero las autoridades no se han comunicado con el transportista, ayer que hablé a Guardia Nacional no sabían nada.
«Hasta ahorita no he visto las patrullas nuevas, de los carros de lujo, los camaros y mustangs, no los he visto».
La Fiscalía de San Luis Potosí aseguró que colabora con la indagatoria, aunque el autobús desapareció en Galeana, Nuevo León, y no en la entidad.
En respuesta, Gerardo Palacios, titular de Seguridad Pública de Nuevo León, afirmó que la Guardia Nacional confirmó que el plagio ocurrió en San Luis Potosí.
«De este lado», dijo, «la policía estatal Fuerza Civil ha logrado localizar a cielo abierto y auxiliar a varias personas extranjeras que en primeras entrevistas confirman esta información (del lugar de los hechos).
«(Los rescatados) habrían logrado ponerse a salvo escapando de sus captores y saliendo de San Luis internándose en territorio de Nuevo León», agregó.