LAS VEGAS, EU.- Marco Antonio Solís, reconocido como Persona del Año el miércoles, víspera de la edición 23 del Latin Grammy, cerró su propio homenaje cantando «Si No Te Hubieras Ido».
Cientos de espectadores, entre los que destacan la mayoría de los famosos que interpretaron antes un puñado de sus éxitos, bailaron emocionados en el Mandalay Bay Events Center.
Esto nunca se había hecho en la historia de este apartado de la gala anual, como tampoco que la figura central abriera la velada con un medley («¿A Dónde Vamos a Parar?», «La Venia Bendita» y «Tu Cárcel») con Los Bukis.
El festejado, como pocas veces, leyó de su teléfono celular algo que escribió para la ocasión, al recibir el galardón.
Entrecerrando los ojos para enfocar bien, y con la respiración algo revuelta, «El Buki» empezó, a manera de prolegómeno: «No sé cómo llegué hasta aquí».
Narró entonces la historia de un niño de 12 años que salió de su pueblo (Ario de Rosales, Michoacán) en busca de cumplir sus sueños, acompañado de su guitarra y de un muy querido primo (Joel Solís).
Contó que las cosas no fueron fáciles, pero tampoco imposibles.
Dio fe de que «El Poderoso Divino» guió sus pasos y que gracias a sus «ángeles terrenales» (esposa e hijos) venció tentaciones y se apartó del ego.
Solís afirmó que el éxito y el fracaso son parte de su andar, de sus pies derecho e izquierdo.
Al pronunciar el «gracias» como una suerte de punto final, todos estaban conmovidos. (Hugo Lazcano/Agencia Reforma)
