
El próximo 14 de mayo se conmemoran 40 años de la muerte de Miguel Alemán Valdés, quien fue presidente de la República Mexicana entre 1946 y 1952. Es reconocido como el primer presidente civil en la era postrevolucionaria, dado que su administración marcó el fin del predominio de los militares en la dirección del país y el inicio de la predominancia civil.
Miguel Alemán Valdés nació en Sayula, Veracruz, el 27 de septiembre de 1903. Fue hijo de Miguel Alemán González y Tomasa Valdés. Tras finalizar sus estudios de secundaria, ingresó a la Escuela Nacional de Jurisprudencia, donde se graduó en Derecho.
En 1929, se unió al Partido Nacional Revolucionario (PNR), que posteriormente lo postuló como candidato para las elecciones federales de 1946. Una vez electo presidente, Alemán Valdés impulsó varios proyectos con el objetivo de incentivar la economía y promover la cultura y la educación.
Entre sus logros más destacados se encuentran la creación de la Dirección General de Turismo, la fundación de la Asociación Nacional de Abogados, los Institutos de Bellas Artes, Nacional de la Juventud, Nacional de Pedagogía, Nacional Indigenista y Mexicano de Cultura. Además, fortaleció la Comisión Federal de Electricidad y promovió la construcción del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, la Ciudad Universitaria, el Auditorio Nacional, la Carretera Panamericana, así como diversos ferrocarriles y obras públicas en general.
Durante su administración, se otorgó el voto a la mujer a nivel municipal, se intensificó la reforma agraria, se promovió la inversión privada y se firmaron diferentes tratados con países extranjeros.
Miguel Alemán Valdés falleció el 14 de mayo de 1983 a causa de un infarto mientras se encontraba en su residencia. Sus restos descansan en la Basílica de Guadalupe, ubicada en la alcaldía Gustavo A. Madero de la Ciudad de México.