“Nada, ni nadie por encima de nuestros derechos”, fue frase clave en el discurso emitido por las mujeres manifestantes, que se apropiaron de la Exedra durante la marcha feminista en conmemoración al Día Internacional de la Mujer, donde por primera vez no estuvieron presentes colectivos de la sociedad civil organizada y se recordó a la maestra Diana Laura Castillo Hurtado, desaparecida desde el pasado 6 de enero en Zacatecas, y a Cynthia Nataly, quien según la Fiscalía se quitó la vida en Villas del Puertecito.
El enorme contingente integrado por miles de mujeres niñas, adolescentes, madres, abuelas y hasta mascotas, partió en punto de las 17:30 horas, de la Fiscalía General del Estado para dirigirse a la López Mateos, Josefa Ortiz de Domínguez y seguir por Madero, estableciéndose en la Exedra de la Plaza de la Patria.
Durante el recorrido el ambiente sororo se apoderó del primer cuadro de la ciudad, desde donde podían observarse carteles con ilustraciones alusivas al Movimiento Feminista, con consignas en contra del Estado y con fotografías de presuntos violentadores.
Este año, a diferencia de las ediciones anteriores, no se contó con la representación del Observatorio de Violencia Social y de Género, ni de la asociación Cultivando Género, lo cual propició que las ciudadanas participaran de la ya tradicional manifestación de manera libre, sin invitación alguna.
Al frente del contingente, amigas y familiares de la maestra de Telebachilerato Diana Laura, clamaban por justicia, mientras que otras exigían al Estado garantizar la erradicación y el castigo de la violencia obstétrica, refirieron que en los hospitales tanto públicos como privados, prevalecen las burlas, la desinformación, humillaciones, discriminación, y la ejecución de procedimientos dolorosos, obsoletos e innecesarios sin el consentimiento de las pacientes.
“Nada ni nadie, por encima de nuestros derechos”, gritaban a través del megáfono, al tiempo que denunciaban que grupos provida y diversos frentes políticos de ultraderecha buscan criminalizar el movimiento para arrebatárselos.
Algunas jóvenes escalaron la balaustrada de la Exedra para instalar una enorme manta con la leyenda “Estado Feminicida”, entre abrazos y algunas lágrimas procedieron a dejar pintas en la cantera de la estructura, como se ha hecho costumbre durante al menos los últimos tres años.
Mientras esto ocurría, decenas de católicos hacían una barrera entre rezos para proteger la Catedral Basílica de Nuestra Señora de la Asunción, cabe destacar que previo a la llegada de los contingentes a la Plaza, algunas personas intentaron instalar una manta que decía “Es Día de la Mujer, No del Aborto”. Sin embargo, ante la resistencia de algunas, desistieron de su cometido.
Este año, llamó la atención la nutrida convocatoria que se tuvo, pues a simple vista la cifra de manifestantes fue mayor en comparación con 2022, cuando la marcha fue duramente criticada por diversos grupos al asegurar que se “había vendido al Gobierno del Estado”, durante la entonces administración del ex gobernador Orozco.