Para el Partido Revolucionario Institucional no hay demora, es ahora cuando debe resolver las acciones a seguir con miras a los comicios del año próximo, con base en los resultados que obtuvo en 2013 y 2015, que a decir verdad, no fueron del todo halagüeños, por lo que acelera el paso o se quedará a la vera del camino.

Para ello deberá tener en cuenta los nuevos escenarios ante el auge de los candidatos “independientes”, que pueden surgir desde el interior como reflejo de una selección inadecuada, lo que abriría un boquete mayor que si la oposición obtuviera el triunfo, ya que en el ejercicio del poder se convierten en los más acérrimos rivales de lo que fuera la casa paterna.

De la misma forma, los directivos tienen que escuchar la voz de la sociedad, y si hay alguien que cumpla los requisitos para ser propuesto, no debe encontrar cortapisa alguna, para ello bastará que se acojan a lo que prevé el Reglamento interno, artículo quinto, el cual señala que puede haber candidatos simpatizantes, que son aquellos que no son militantes y optan por la postulación del partido en la elección constitucional.

Es un paso difícil, ya que debe convencer a los que están en la fila y a los votantes, pero se puede dar si el externo tiene mayores posibilidades de triunfo, lo que sería en todos los niveles de competencia. La cuestión radica en cómo dominar la resistencia que históricamente ha existido, de aceptar que uno ajeno represente al priismo.

En su Plataforma Electoral, el Revolucionario Institucional reconoce que como partido “afronta los retos del país dialogando, propiciando la participación abierta, franca y honesta de hombres y mujeres que expresan sus ideas, sus preocupaciones y que buscan soluciones”.

Además, concede que el ejercicio político sólo es efectivo “cuando es participativo, cuando está próximo a los ciudadanos y junto con ellos aborda los problemas, por complejos que sean, y construye soluciones viables en una sociedad cambiante”.

En esta última parte está el sustento de todo, del que parte la intervención individual y colectiva en actividades partidistas, porque si encuentra atención, reciprocidad y responsabilidad de los líderes, no dudará en hacerse presente. Más que crear programas para interesar a los militantes, será suficiente ceñirse a los postulados del propio organismo y sólo añadir las contribuciones que se hagan en cada distrito y municipio.

El mensaje político debe ir enfocado a la realidad que se vive y que los Documentos Básicos del PRI señalan claramente, al aceptar que “hay muchos desafíos que superar en materia de desarrollo económico, desarrollo social, seguridad y justicia, educación, medio ambiente, igualdad de oportunidades e inclusión digital”, entre otros.

Aunque cause escozor, Aguascalientes no ha logrado erradicar la pobreza, el desempleo y la inseguridad, que sumado a la reducida inscripción en instituciones públicas de educación superior, exige que el tricolor escuche el clamor popular, que con la suficiente anticipación entienda que los discursos, las promesas y los compromisos por escrito ya no convencen, como tampoco significan mayor cosa las grandes concentraciones si éstas no se manifiestan ante las urnas; por consiguiente, debe modificar y apurar su plan de acción para no verse superado, teniendo presente sus propios postulados: “El PRI no debe rehuir cuando se presenten problemas […] debe ser realista y generar propuestas que permitan potenciar el desarrollo”.

IVA, ¿A TODO?

El gobierno federal no contempla aplicar el Impuesto al Valor Agregado (IVA) de forma general, al considerar que sería una medida que afectaría en mayor grado a las clases más desprotegidas, lo que no obsta para que el sector empresarial insista que debería hacerlo para allegarse más recursos.

Sostienen que mediante este mecanismo ningún mexicano quedaría exento de aportar al fisco y de paso habría un combate frontal a la informalidad, ya que aún los productos más sencillos tendrían que pagar el 16%, lo que paulatinamente alejaría a los compradores del comercio callejero.

Para el presidente del Colegio de Contadores, Marco Galindo Gallardo, ante la caída de la economía la federación no tiene otra salida más que gravar con el IVA a todos los productos, para ello no debe tener miedo al costo político, pues el mercado interno requiere reactivarse.

Aseguró que México es el único país miembro de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) “que no lo aplica y por ello no recauda lo suficiente”, y no se hace por los habitantes que tienen poco ingreso, pero para ello hay mecanismos que permitan apoyarlos.

El dirigente sostuvo que la reducción en las predicciones de crecimiento económico se ha dado desde el año pasado, por lo que ha sido menor a la inflación, lo que naturalmente tiene un impacto muy importante en el gremio de los contadores y los empresarios.

“Sabemos que esto puede tener un impacto político importante, pero si queremos competir en el OCDE, somos el único país miembro que no tenemos este proceso impositivo y que permite recaudar más, pues de esa forma todos los ciudadanos pagan impuestos.”

Marco Galindo recordó que el IVA generalizado “es una propuesta que se ha venido manejando desde hace muchos años, pero igual se ha hecho de lado por miedo al costo político, el análisis que se hace es que puede tener un impacto muy fuerte, entonces, nadie ha querido tomar la batuta en este sentido”.

Le restó importancia al hecho de que si se aplica IVA a medicamentos afectará a los que ganan menos, porque la mayoría son afiliados al Instituto Mexicano del Seguro Social, que por su parte debe mejorar el nivel de servicios para no tener que recurrir a la medicina privada.

La otra cara de la moneda está en que de llegarse a cobrar el citado gravamen a todo, sería también a alimentos, lo que obligaría a reducir más la canasta que llega a la mesa de millones de hogares y esto es, precisamente, lo que ha frenado la exigencia de que se aplique. Más que temor, el gobierno entiende que no es posible apretar más al pueblo y no quiere abrir la puerta a una revuelta social. La mejor lección de ello se encuentra en las dos grandes revoluciones de México, la de 1810 y 1910, que ante el hambre obligaron a las masas sociales a tomar las armas, algo que no debe repetirse.

REVISIÓN EN AUTOBUSES

Cuando alguien aborda una unidad en la Central Camionera lo hace sin restricción alguna, ya que lo único que debe hacer es pagar el boleto, sin embargo, los asaltos que se han registrado a nivel nacional en los viajes modificará esta antigua costumbre, luego de que un tribunal federal determinara que las líneas de autobuses foráneos están obligadas a verificar que los clientes no suban armados.

Por lo anterior, debe haber una revisión exhaustiva a cada persona y su equipaje, en caso contrario, serán responsables de los daños que sufran los pasajeros por violencia en las unidades, lo cual vendría a ser una reedición de lo que se vive en los aeropuertos, donde hay detectores y una serie de prohibiciones sobre los artículos en la maleta, llegándose al extremo de que ni siquiera un cortaúñas puede llevarse porque se supone que podría ser usado para causar daño.

El Octavo Tribunal Colegiado en Materia Civil confirmó la sentencia del Tribunal Superior de Justicia del DF, que condenó a la empresa Grupo Pullman de Morenos a indemnizar con 255 mil pesos a un usuario que sufrió una herida de bala durante un asalto en 2012.

En la tesis publicada el 26 de junio, el Tribunal describe: “Si la compañía autotransportista no demuestra haber revisado a los pasajeros al momento del abordaje, es responsable de los riesgos y daños ocurridos con motivo del disparo de un arma de fuego en el interior del autobús, por su negligencia y falta de cuidado que redundan en la falta de seguridad a los pasajeros”.

Por lo descrito, si en algún momento le piden en la Central Camionera que antes de subir al vehículo abra sus valijas o pase al “esculque”, no tendrá otra opción, lo que por otra parte obligará a las empresas a contratar el personal necesario para esta labor.