Jesús Carvajal y Érick González
Agencia Reforma

MONTERREY, NL.- La seriedad del cuerpo de seguridad de Rayados ni la presencia más de más de 50 personas a su alrededor le quitaron lo dicharachero a Javier Aguirre, en su llegada anoche a la Ciudad.
Apenas pasó la puerta de salida de la Terminal B del Aeropuerto Internacional de Monterrey a las 8:41 de la noche recibió unas flores de la aficionada Patricia Lozano.
Tras agradecerle el gesto, rodeado de guardias y reporteros, el nuevo director técnico albiazul se dirigió, como pudo, a la camioneta del club que lo llevaría a un hotel de San Pedro.
«Cuidado con la cartera», les dijo a quienes lo intentaban abordar. Una misión difícil, como la que seguramente será la que iniciará a partir de hoy cuando comience a dirigir a sus Rayados.
Aguirre sabía que no podía dar declaraciones, hasta hoy que sea presentado por la tarde, pero mostró agradecimiento.
«Gracias, estoy muy contento, gracias», alcanzó a decir Aguirre entre el tumulto.
Ya al llegar al hotel, a las 9:26 de la noche, sin los amontonamientos del aeropuerto, se bajó tranquilo de la camioneta, saludó a los pocos presentes y se dio tiempo de contestar una pregunta de CANCHA.
¿Ya listo, Javier?
«Ya estamos listos, gracias», respondió antes de ingresar al lugar.
Aguirre, quien no dirige en México desde el 2001, tendrá esta mañana el primer contacto con sus pupilos en El Barrial.
Ahí comenzará el nuevo reto de la la carrera del «Vasco», quien desde anoche ya advirtió, con su peculiar manera de ser, que está listo para defender a las rayas.