Laborar con la muerte forma parte de su vida

José Luis González Álvarez, sepulturero en el Panteón de la Cruz y Los Ángeles, compartió detalles sobre su vida cotidiana y su experiencia de más de dos décadas trabajando en estos emblemáticos lugares. Estos cementerios, inaugurados en 1875 y 1903 respectivamente, han sido testigos de innumerables historias a lo largo de los años, y José Luis compartió algunas de las anécdotas más fascinantes.

González Álvarez lidera un equipo encargado de los servicios de inhumación y exhumación, lo que implica el manejo de restos mortales. Con más de 20 años de experiencia en este campo, ha presenciado eventos diversos y conmovedores en el panteón. «No cualquiera puede desempeñar esta labor», enfatizó. «Requiere valentía y la habilidad para lidiar con las emociones de las personas en un momento tan delicado de sus vidas. Nos centramos en nuestra tarea y procuramos no pensar en las personas».

A pesar de las historias populares de fenómenos sobrenaturales en los panteones, José Luis confesó que personalmente nunca ha experimentado nada inusual en el lugar. No obstante, ha escuchado relatos de colegas que han tenido encuentros paranormales, como el de una colaboradora que realizaba recorridos de «Mitos y Leyendas» en el panteón de los Ángeles y afirmó haber visto a una niña en uniforme escolar, a pesar de que en ese momento no se permitía la entrada de menores al lugar.

Los panteones albergan los restos de personajes ilustres, como el profesor Enrique Olivares Santana, el general Luis Gilardi, el niño Chavita y el impresor José Trinidad Pedroza, entre otros. Uno de los aspectos más peculiares del lugar es el culto al «niño Chavita», al que la gente continúa llevando juguetes como ofrenda, ya que se le atribuyen milagros.

Dijo que como en muchos otros cementerios, algunas personas realizan diversos tipos de prácticas relacionadas con esoterismo, lo que deja una serie de elementos ajenos que son manejados como desechos.

INVITACIÓN. José Luis González hizo un llamado a la comunidad para que visite estos espacios y muestre respeto por el lugar, especialmente ahora que se acerca la temporada de Día de Muertos. Recordó que se encuentran abiertos de lunes a domingo, de 7 de la mañana a 6 de la tarde. También advirtió sobre la importancia de mantener la seguridad en el lugar y pidió a los visitantes que sigan las instrucciones del personal del panteón para que su recorrido sea tranquilo.