
En medio de la incertidumbre generada por la desaparición del Instituto de Salud para el Bienestar y su posible reemplazo por el IMSS-Bienestar, el dirigente del Sindicato Único de Trabajadores del Hospital Miguel Hidalgo, Francisco Javier Araiza Méndez, manifestó su preocupación por la forma en que se ha gestionado la atención médica a nivel federal.
En una conferencia de prensa, el líder sindical destacó que la desaparición del Seguro Popular para crear el Insabi se promocionó mucho al inicio del Gobierno Federal, pero con la desaparición de este instituto y su integración en el IMSS-Bienestar, surge la preocupación de que la infraestructura actual del IMSS no sea suficiente para atender a toda la población, lo que podría generar una sobrecarga en el sistema.
Estableció que actualmente el IMSS brinda atención al 70% de la población del estado y no cuenta con la capacidad suficiente para absorber a los miles de habitantes que pasarían a su cargo si se centraliza la atención médica en el estado. «Un incremento de hasta un 15% en la carga de trabajo pondría en riesgo la calidad y disponibilidad de los servicios de salud, lo cual es motivo de preocupación tanto para los trabajadores del hospital como para la comunidad en general».
Respecto a la posible entrega del Hospital Hidalgo a la Federación, manifestó que mientras llegue el recurso para los trabajadores y se asegure el abastecimiento de insumos, se busca mantener la autonomía del nosocomio. No obstante, resaltó que el sindicato buscará que no se vulneren las prestaciones de los trabajadores y que se generen las mejores condiciones para ellos.
Por eso, expresó su confianza en la capacidad del Gobierno Estatal para mediar y evitar que el Hospital Miguel Hidalgo pase a ser controlado por el Gobierno Federal.
En cuanto a la gestión de la salud en el estado, el dirigente sindical afirmó que en los últimos seis meses ha habido un trabajo importante para mejorar la atención en salud, pero se ha notado una falta de congruencia en las decisiones a nivel federal.
Además, reconoció que la falta de medicamentos es un problema a nivel nacional y también se ha visto reflejado en el Hidalgo, aunque se ha estado trabajando para subsanarlo.