
Frida Andrade Agencia Reforma
CIUDAD DE MÉXICO.-Inicia el frío y en el mercado mexicano hay escasez de ropa invernal.
Chamarras, suéteres y abrigos hay en menor cantidad respecto a otros años.
La razón, es varios de estos productos provienen de Oriente, de manera formal o informal, pero no han podido llegar o lo hicieron a destiempo ante los diversos problemas de logística, explica Emilio Penhos, presidente de la Cámara Nacional de la Industria del Vestido (Canaive).
Las empresas productoras en México tienen un mayor número de pedidos de las tiendas retails, pues los contenedores provenientes de Asia llegaron con retraso y la demanda fue mayor a la esperada, informó Penhos.
«Hay dos factores importantes, el primero: se hizo una compra muy conservadora pensando en que este iba a ser un año demasiado lento y el repunte al fin del año es demasiado elevado, va más arriba de las expectativas esperadas, entonces se compró menos.
«Y la segunda cosa es que lo que se compró y esperaba que llegara, los contenedores no pudieron llegar o llegaron demasiado tarde por lo tanto eso generó un hueco que es muy notorio», detalló Penhos en entrevista.
Emilio Mussali, secretario del Consejo Directivo de la Canaive, dijo que las fábricas están a todo vapor tratando de producir y entregar la mayor cantidad de producto, no sólo de ropa invernal, sino de toda la cadena completa.
«Tienes solicitudes mucho más amplias por productos nacionales en textiles porque mucho de esto era proveniente de Asia y no lo van a tener», detalló Penhos.
Si bien es cierto que esta actual tendencia representa una oportunidad para la producción mexicana, se requiere que exista una mayor fabricación de chamarras en el País con el fin de que no se pierda el mercado que se ha ganado con la actual situación, comentó Penhos.
La entrada de prendas chinas a México provocó que la mayoría de las fábricas de chamarra quebraran, pues no pudieron competir con los niveles de precios del país asiático, recordó Penhos.
«Era una competencia totalmente fuera de contexto porque no era la misma cancha, no era justo», agregó Mussali.
Por lo que esta oportunidad abre la posibilidad de que el fabricante que en el pasado haya hecho chamarras u hoy quiera volver a la industria, tendría un espacio abierto, incluso para varios jugadores, destacó Penhos.