
Frida Andrade Agencia Reforma
CIUDAD DE MÉXICO.- Mientras que en diversos países ya se cuentan con incentivos fiscales para la venta de autos eléctricos, en México no existen.
Si bien en el País se tienen algunos atractivos hacía la comercialización de autos eléctricos, pues los dueños de estos quedan eximidos del pago de la tenencia, así como de la verificación durante los primeros ochos años, otras naciones ofrecen incentivos fiscales atractivos.
Por ejemplo, en Estados Unidos por adquirir un vehículo eléctrico, sin importar si está hecho o no en ese país, se tiene la deducibilidad de impuestos promedio por 7 mil 500 dólares, monto que cambia según el estado, informó Gerardo Gómez, director de J.D. Power en México.
De igual forma en Alemania la deducibilidad que se le ofrece al comprador y que recuperaría al declarar sus impuestos es de alrededor 8 mil 690 dólares (8 mil euros), expuso Gómez.
Para el experto, en México el vehículo eléctrico estaba pensado en el pasado como de nicho, pero poco a poco se empieza a democratizar, por lo que se van a requerir más beneficios tanto fiscales, como de crédito y de infraestructura para que las personas los puedan adquirir con mayor facilidad.
De inicio deberían venderse a precios competitivos, destacó.
En el País, el precio promedio de un auto en general es de 399 mil pesos, sin importar si es eléctrico o de combustión interna, por lo que se debe buscar que uno eléctrico no exceda más allá de un 20 o 30 por ciento ese costo.
También es necesario contar con la infraestructura de carga y que las estaciones sean eficientes y rápidas.