Víctor Fuentes
Agencia Reforma

CIUDAD DE MÉXICO.-La Barra Mexicana de Abogados (BMA) pidió al Presidente Andrés Manuel López Obrador respeto para el Poder Judicial Federal (PJF), luego de dos días consecutivos de ataques durante las conferencias mañaneras.

«La BMA exhorta al Presidente de la República y a los integrantes del Congreso de la Unión a conducirse con respeto en sus expresiones públicas respecto del PJF y sus integrantes. Denostar, ofender, calumniar o hacer aseveraciones sin argumentos ni pruebas, respecto del trabajo de las personas impartidoras de justicia solamente debilita nuestra democracia y nuestro sistema jurídico», afirmo en un comunicado la barra, uno de los tres colegios de abogados más importantes del País.

«Las autoridades públicas e integrantes de los Poderes de la Unión que hacen descalificaciones a jueces, magistrados y ministros, quebrantan el principio de independencia judicial», agrega el comunicado, firmado por el Presidente de la BMA, Víctor Olea Peláez.

En su conferencia del miércoles, López Obrador acusó que, tras la elección de la Ministra Norma Piña como presidenta de la Suprema Corte de Justicia, en enero pasado, se ha desatado una ola de sentencias favorables a acusados en casos de alto perfil, y describió al Consejo de la Judicatura Federal (CJF) como un florero que está de adorno.

«La decadencia del Poder Judicial que viene del antiguo régimen y está infectado, plagado de corrupción. Es un Poder Judicial que se fue construyendo para proteger a corruptos y a las élites del poder económico y del poder político de nuestro País», dijo el Presidente.

«Por eso esos amparos constantes. Hay protección para delincuentes comunes, para la delincuencia organizada y sustracción para delincuentes de cuello blanco. Esos son los hijos predilectos del régimen anterior. Ojalá y el Poder Judicial se reforme», añadió.

Este jueves, el Presidente reiteró que es indudable que «existe mucha corrupción» en el Poder Judicial, aunque admitió que en su sexenio ya no será posible reformarlo.

«Nadie tiene derecho a violentar o agredir a las y los jueces mexicanos. Dividir a la sociedad mexicana basado en prejuicios no es propio de demócratas, ni de los lideres que requiere nuestro País», concluyó la BMA.

El propio PJF ha optado por guardar silencio ante las criticas del Ejecutivo, en contraste con episodios de sexenios previos, particularmente en la década de los 90, cuando ataques de mucho menor perfil generaron una fuerte respuesta institucional de la Corte y el CJF.