
A partir de la próxima semana, el Instituto de Servicios de Salud del Estado de Aguascalientes iniciará un proceso para desmantelar los cotos de poder existentes dentro de sus 119 unidades. Esta medida responde a la presencia de familias y grupos que han asumido el control administrativo de las mismas, tal como explicó el titular de la dependencia, Rubén Galaviz Tristán.
El secretario de Salud aseguró que se llevará a cabo una reingeniería en el capital humano y en la mejora de las unidades, para lo cual se ha destinado un recurso económico de 350 millones de pesos. Este fondo servirá para efectuar «la limpieza» y el control saludable de las áreas administrativas de los hospitales, centros de salud y la Unidad de Especialidades Médicas en Centros de Atención Primaria en Adicciones, entre otros.
En una entrevista con El Heraldo, el titular del ISSEA anunció que este proceso de depuración administrativa comenzará en el hospital de Calvillo, que actualmente se encuentra en un estado de abandono significativo. Explicó que cuando la actual administración estatal asumió el cargo, sólo se designó al cuerpo directivo, pero ahora se están analizando y determinando los cambios a implementar en ese lugar.
El funcionario subrayó que este problema no se limita a unas pocas unidades, sino que afecta a todas, dado que se han acumulado años de falta de supervisión y control administrativo, lo que ha permitido la formación de cotos de poder. Ante esto, Galaviz destacó que la gobernadora Tere Jiménez Esquivel ha decidido tomar medidas a favor de la calidad y se llevará a cabo una reingeniería del capital humano en el sector salud, incorporado al ISSEA.
OBSOLETAS. Rubén Galaviz Tristán reconoció que las 119 unidades del ISSEA arrastran hasta 20 años de retraso en la mejora del equipamiento, lo que ha conducido a su obsolescencia. Por esta razón, todos los sistemas de salud en el estado serán modernizados de manera gradual. La inversión destinada para esto ascenderá a 350 millones de pesos.