Hace todavía un par de años, las pastorelas que se realizaban al interior de las instituciones educativas, iglesias y otros foros, estaban repletas de diablitos, pastores, ángeles, reyes magos y demás personajes tradicionales, sin embargo, de un tiempo para acá son los disfraces de personajes de caricaturas, duendes y Santa Claus los más vendidos, por lo menos por los comerciantes que se dedican a ello en la parte alta del Mercado Terán.

Hace un par de años era impensable que un niño fuera vestido a su pastorela de mono de nieve o bien de una princesa de cabellera larga, trenzada y rubia con vestido en tonos azules, sin embargo, María del Refugio Palacios, vendedora de disfraces, indica que desde el año pasado los personajes de la Elsa y Olaf de la película infantil Frozen son los más cotizados para estas fechas.

Los pantaloncitos de manta que conforman los disfraces de pastorcitos, la túnica de San José o el vestido de la Virgen María, sólo son pedidos si es una exigencia de parte de las maestras quienes montaron la obra, sin embargo, si el vestuario es opcional y del gusto de cada comprador, los tradicionales ni “los pelan”, indicó la vendedora.

Luego de los que representan a los personajes de caricatura, el más vendido es el de Santa Claus, seguido de los de duende; al parecer los diablitos y angelitos están fuera esta temporada, y quien sabe cuantos más.

Sus ventas, sostuvo, no se han visto disminuidas, pues atendiendo a las demandas de sus clientes, ha surtido su negocio con los disfraces más pedidos, aunque no ha dejado de exhibir aquellos que ella considera como más tradicionales.

Finalmente, informó que los disfraces van desde los 120 hasta los 250 pesos y aunque todo el año el negocio está activo, la primavera y el invierno son las temporadas cuando más desplazamiento de mercancía se presenta.