Bernardo Uribe
Agencia Reforma

CIUDAD DE MÉXICO.- Jorge Claudio tenía más de 15 años vendiendo tamales en Cuautitlán Izcalli, Edomex. En pleno 24 de diciembre fue atropellado por un conductor, quien enfrenta su proceso legal en libertad.
Ayer, familiares y amigos encabezaron una marcha para pedir al Fiscal del Estado de México y al Municipio que no haya impunidad en su caso.
Martha Reyes, prima de Jorge, afirmó que la petición de la familia es que se entregue la carpeta de investigación y que se esclarezca el proceso de la investigación por parte de las autoridades.
«Si quieren negociar, que vengan a dar la cara», dijo Martha mientras la familia hablaba con algunos funcionarios públicos enviados para gestionar la liberación de la carretera.
La marcha comenzó después del mediodía, en Avenida del Jacal, en la Colonia La Perla. Después, se dirigió al punto en donnde fue encontrado muerto el comerciante, para llegar a la Carretera México-Querétaro y cerrar el paso en ambas direcciones por alrededor de dos horas.
La liberación de la vía se dio después de que el hijo de Jorge, Jorge Raziel, habló por teléfono con las autoridades y se pactó una reunión en la Fiscalía.
«Cuando llegamos al Ministro Público nadie nos decía nada, sólo escuchábamos comentarios ofensivos por parte de la familia del conductor, decían ‘¿cuánto puede valer la vida de un tamalero?’, sólo se burlaban de nosotros», agregó Martha.