Para ganarse la vida y apoyar al sostenimiento de su familia, la señora María de Jesús López Padilla se dedica al reciclaje de la basura desde hace cinco años. Además, considera que aún falta mucha cultura del reciclaje y separación entre la sociedad.

“Mi trabajo es reciclar todo lo que sea para vender, como papel, plástico, aluminio y fierro. Yo lo hago con el fin de obtener un recurso más”.

Detalló que diariamente recolecta bolsas con plástico, además de que tiene personas que le regalan lo que puede ser para reciclaje. “A mí las personas me regalan, hay casas a las que voy y ya me recolectan y en mi domicilio separo y así es más rápido”.

Indicó que a la semana, su esposo lleva lo recolectado a un centro de reciclaje ubicado sobre la avenida Canal Interceptor y por el cual recibe un promedio de 300 pesos.

Durante su actividad diaria, María de Jesús considera que hace falta una mayor cultura entre la gente en general para la separación de la basura pues afirma que es constante ver bolsas afuera de los contenedores e incluso rotas. “Mientras no se culturice la gente, no se puede hacer nada. Dejan las bolsas afuera del contenedor. Eso no me parece correcto. Yo estoy en contra de eso”.

A lo largo de este tiempo, comentó que le ha tocado ver cómo gente tira electrodomésticos y material de deshecho en los contenedores sin el debido cuidado, a pesar de los riesgos para la salud. “Tiran toda clase de desechos, tiran todo y eso provoca que las personas que andan entre la basura se enfermen”.

Desde hace dos años, la señora María de Jesús padece de asma y a partir de ahí, afirma tener ciertos cuidados. “Yo en las casas a donde voy soy muy agradecida, ellos me dan el reciclaje y si puedo les tiro su basura. Hay veces que se topa uno con personas que dicen ¿porqué hace eso? Pues porque nadie me va a dar el dinero que yo ocupo porque yo necesito trabajar”, finalizó.