
Veintisiete obras de Oscar Niemeyer, ubicadas en Brasilia, Río de Janeiro y Sao Paulo, son, desde el 7 de junio, patrimonio público.
Bajo el nombre de «Conjunto de Obras del Arquitecto Oscar Niemeyer», la homologación se logró luego de un proceso de 10 años, que inició el propio arquitecto.
Así, se impide que las obras sean modificadas reformadas sin la autorización del Instituto de Patrimonio Histórico y Arquitectónico Nacional y convierte al Estado en su guardián aunque no le pertenezca, de acuerdo con el Ministerio de Cultura de ese país.
En conjunto con el urbanista Lúcio Costa, Niemeyer creó Brasilia desde 1960, ciudad que está considerada Patrimonio Histórico y Cultural de la Humanidad desde 1987; aquí se ubica la mayoría de sus obras.
Por mencionar algunas: los palacios de Planalto (sede del Gobierno Federal), de la Alvorada (residencia presidencial), de Itamaraty (sede de la Cancillería) y el de Justicia (sede de la Corte Suprema), así como el Congreso Nacional.
También se encuentran el Museo de la Ciudad, la Iglesia de Nuestra Señora de Fátima, el Teatro Nacional y el Memorial de los Pueblos Indígenas.
En Río de Janeiro quedaron bajo protección del estado la Casa de las Canoas, la Pasarela de Samba y el Museo de Arte Contemporáneo de Niterói.
Y en Sao Paulo, el Conjunto del Parque de Ibirapuera y los palacios de los Estados, de las Industrias, de Exposiciones o de las Artes y de Agricultura.
Niemeyer impuso su firma en cerca de 200 proyectos arquitectónicos en Brasil y en otros países como Estados Unidos, Francia, Italia, Portugal, Cuba y Argelia.
Murió en diciembre de 2012 con casi 105 años.
En su inconfundible estilo, de curvas en hormigón armado, a estos edificios seguramente los querrás retratar en unas vacaciones por Brasil.
BRASILIA
– Catedral de Brasilia
La Catedral Metropolitana de Nuestra Señora Aparecida es una de las principales obras de Niemeyer en la capital brasileña, por lo que ya estaba considerada patrimonio nacional desde 1967. Se distingue por su estructura conformada por 16 columnas de concreto en forma hiperbólica, el interior dotado de vitrales y que no tiene cruz.
– Iglesia de Nuestra Señora de Fátima
Se construyó a petición de la esposa del entonces presidente Juscelino Kubitschek (1956-1961) y fue uno de los primeros templos que realizó Niemeyer en esta ciudad. Por su reducido tamaño, popularmente se conoce como «la igrejinha».
– Congreso Nacional
En la Plaza de los Tres Poderes, donde se encuentra el Congreso Nacional, es una de las principales atracciones turísticas de Brasilia. El Congreso se compone de dos edificios semiesféricos, separados por un par de columnas centrales.
RÍO DE JANEIRO
– Pasarela de Samba
Más conocido como el Sambódromo, éste puede recibir más de 70 mil personas durante el Carnaval y es uno de los espacios más importantes al aire libre de la ciudad carioca. Mide 550 metros de longitud.
– Museo de Arte Contemporáneo de Niterói
El edificio principal, de 16 metros de altura y tres pisos, por su forma circular (con un diámetro de 50 metros) ha sido comparado con un ovni. Ofrece vistas panorámicas a la Bahía de Guanabara y a las ciudades de Río de Janeiro y de Niterói, ciudad que pertenece al estado de Río de Janeiro.
SAO PAULO
– Conjunto Parque del Ibirapuera
Está considerado el pulmón verde de la ciudad. Posee una extensión de 158 hectáreas, donde hay tres lagos interconectados, y los museos Afro Brasil, de Arte Moderno y de Arte Contemporáneo, entre muchos otros espacios.