Desde el hangar del Gobierno del Estado hasta el interior de un avión equipado con instrumentos de dispersión, Luis García Saavedra, navegador del proyecto de inducción de lluvias de Startup Renaissance, muestra cómo la ciencia y la innovación mexicana están transformando la lucha contra la escasez de agua.
La técnica de inducción de lluvias emplea el reactivo Rainmate. Con una patente nacional, se ha utilizado en estados del norte, como Baja California, Durango, Chihuahua, Sonora, Zacatecas y Nuevo León. Recientemente, se ha incorporado en la región del Cutzamala, vital para el abastecimiento de agua de la Ciudad de México. Hoy, es el turno de Aguascalientes para evaluar su efectividad.
El proceso es fascinante: el reactivo se dispersa en las nubes, donde aglutina microgotas de agua gracias al yoduro de plata. Esta acción da lugar a gotas más grandes que caen en forma de lluvia. Dependiendo del color de la nube, la eficacia puede variar, siendo especialmente útil en nubes grises o negras.
Dentro del avión, Saavedra nos mostró la tecnología detrás de la inducción. «El sistema tiene tres componentes esenciales:
- Un tanque de presión.
- Un tanque con el reactivo, al que cariñosamente llamo ‘batido de plata’.
- Un aspersor en la parte trasera”.
Aquí, las nanopartículas son esenciales, siendo expulsadas en forma de microgotitas a través de una palanca y tecnología avanzada de navegación. Su capacidad de mantenerse en suspensión, junto con la presión y velocidad del avión, asegura su permanencia en la atmósfera, fusionándose eventualmente para producir lluvia.
La ubicación exacta para la liberación del reactivo se selecciona estratégicamente, considerando factores como la dirección del viento y la altitud, y se busca aprovechar al máximo la humedad de regiones cercanas, como Jalisco.
Con una colaboración estrecha entre el Gobierno Estatal, el Federal y Startup Renaissance, Saavedra aclara: «No creamos nubes; aglutinamos las gotas presentes para que caigan».
Con sólo tres vuelos realizados en Aguascalientes, los resultados son alentadores. Hay programados unos 20 vuelos adicionales con el propósito de asegurar el recurso hídrico en la región.
«Pido paciencia a la ciudadanía. Estamos comprometidos con nuestro objetivo: abastecer a Aguascalientes de agua», afirmó.